Abrojo a cuatro
25/04/2022
Me acerqué en un jardín cordobés a apreciar las rosas que crecían, no muy densamente, con lo cual en el terreno libre pude apreciar la humilde invasión de estos ranúnculos que no había visto en ningún otro lugar. Mi atención se concentró entonces en sus flores, menos vistosas que otros congéneres, pero dejando entrever lo que van a ser sus frutos, generalmente con espinas cortas en ambas caras, lo cual podría dar sentido a sus nombres vulgares, donde la presión sobre ellos puede ser poco recomendable. Que me perdonen las rosas del jardín, pero dejé el lugar con las fotos del ranúnculo y ninguna realizada sobre ellas.
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